Sentir, pensar, no actuar

  Y qué sientes cuando la vida pasa y te arrastra con ella. Imposible evitar un final seguro, pero siempre está la lucha incontrolada, pariente directo del instinto adjudicado y arraigado de lo conocido dicho sentido común y obligación.
   Qué ocurre si una mañana de esas, en la cual uno no se puede ni levantar de la cama y lucha por ello, qué pasa si decides y no piensas como tantas veces olvidarte de todo y romper con todos los moldes que vienen inscritos de serie, el mundo funciona así, compañero, es un gran mecanismo creado por nosotros mismos? No puedes escapar, tu particular cárcel en vida. Puedes distraerte, pero difícilmente decidir, sí pensar, pero no actuar. Si decides plantar cara al mecanismo serás un engranaje más, expulsado y enviado al más profundo olvido de este maldito sistema podrido.
   Lo que sí puedes, amigo, es sentir y luchar por tu causa, no creas que eres el único, ni te derrumbes, agárrate con fuerza y tendrás un gran motivo, lucha por una gran revolución y no te dejes embaucar, recuerda, debes de nadar a contracorriente.
 
   No te esfuerces en pensar, no sirve de nada.